jueves, enero 31, 2019

Resumen del mes: enero




Este año tengo esta idea de hacer resúmenes mensuales. Un wrap-up, vaya, pero como nunca me ha gustado usar el término, me referiré a ellos como lo que son: resúmenes de lo que hago en el blog y lo relacionado con lecturas y similares. Aún no decido muy bien cómo estructurarlo, así que éste es el primero de los resúmenes y los demás los iré acomodando por ensayo-error, a ver qué pasa. 

RESUMEN DE ENERO


Enero fue un buen mes en muchos sentidos. La verdad es que comencé el año con muchos ánimos y haciendo cosas que me gustan, compartiendo momentos lindos con personas importantes y divirtiéndome mucho. En la lectura y el blog, también siento que fue un buen mes. Publiqué un total de 7 entradas y, si consideramos que durante un tiempo no publiqué más que una cada mes o cada dos meses, es una buena cantidad. 

ENTRADAS GENERALES

→ Reto Leyendo a los Clásicos 2019

Reto anual de lectura; el objetivo es leer al menos 5 libros clásicos en todo el año. Las inscripciones siguen abiertas, por si alguien quiere anotarse.

→ Mis escritos y yo

Una reflexión personal sobre mi escritura y cómo es que mi estilo y aprendizaje en el tema está llena de dos influencias importantes: el fanfiction y mi elección de carrera.

→ Journal y planner 2019

Un paseo por el journal que uso este año y el planner que estoy llevando con el blog.


RESEÑAS PUBLICADAS


Anne of Green Gables, de L. M. Montgomery  | ★★★★☆ | Reseña completa

Este libro lo leí en diciembre y fue uno de mis favoritos, no sólo de ese mes, sino del año pasado. Me encantó mucho el personaje de Anne y, en general, disfruté muchísimo leyendo esta historia. Me parece una historia súper tierna, definitivamente me enamoré del personaje y su amor por el mundo.


All The Crooked Saints, de Maggie Stiefvater | ★★★★ | Reseña completa

All the Crooked Saints es una historia sobre la familia y eso me agrada.  Tiene un toque de realismo mágico que me deja un buen sabor de boca: entre un hombre que se convierte en gigante, una chica sobre la cual no para de llover y hasta un Padre con cabeza de coyote, los milagros de Bicho Raro demuestran que nunca son lo que tú esperas.


A Little Princess, de Frances Hodgson Burnett | ★★★★☆ | Reseña completa

Hace muchos, muchos años vi la película y el año pasado, más por coincidencia que por otra cosa, leí el libro. Me gustó mucho. Me encanta la personalidad de la protagonista y su visión del mundo. Aún tengo pendiente volver a ver la película, para ver si existen muchas diferencias entre la versión literaria y la cinematográfica.



Mini reseñas: antologías y libros de relatos | Varios | Reseña completa

Durante 2018 leí más relatos cortos que en otras ocasiones. Leí un total de 4 compliaciones de cuentos cortos: Stars Above, de Marissa Meyer; Arenas movedizas, de Octavio Paz; El cementerio sin lápidas y otras historias negras, de Neil Gaiman y Dreams from the Witch House: Female Voices of Lovecraftian Horror, de varias autoras. Reseño brevemente cada antología. Hay variedad: fantasía, realismo mágico (o una aproximación al realismo mágico), historias de suspenso, horror... échense una vuelta por allá.

LECTURAS DEL MES


Saga, Vol. 1, de Brian K. Vaughan | ★★★

No tenía idea de qué esperar con esta historia y más allá de las recomendaciones de dos personas, no sabía bien qué encontrar aquí. Me está gustando, está divertida, la ambientación está chida y tiene suficiente misterio como para tenerme enganchada. Pronto me compraré el segundo volumen también.


Fahrenheit 451, de Ray Bradbury | ★★★

A pesar de que es un libro corto, lo leí a pedacitos porque estos libros de hace años que hablan de un futuro distópico que se parece sospechosamente a nuestro presente, me perturban mucho. En cierto sentido, no fue lo que esperaba, pero tampoco me deja un mal sabor de boca.


Sea Witch, de Sarah Henning | ★★☆

Estuvo entretenido, pero hay algo en él que no me termina de encantar. Aunque sí hay una parte en la que logró sorprenderme, al final no creo que sea una lectura memorable. Peeeero plantea una idea interesante de cómo es que se origina la bruja del mar en la Sirenita.


Mil Tormentas, de Tony Sandoval | ★★

El dibujo me gusta mucho, pero la historia no termina de hacerme clic. No sé si soy yo, si lo leí sin prestarle tanta atención o qué, pero siento que salta de un momento al otro sin ritmo, y, desde mi perspectiva, quedan muchos cabos sueltos.

OTROS

Durante este mes descubrí que en los grupos de Goodreads, se pueden crear retos personalizados, así que en el grupo del reto de lectura de clásicos pueden agregar su propio reto. De hecho, no es necesario que estén anotados en el blog, pueden unirse desde GR y participar en las discusiones que hay en el grupo, sólo den clic aquí.


Hasta aquí el resumen del mes, a ver qué tal me va en febrero. ¡Nos leemos!

martes, enero 29, 2019

Journal y planner 2019



Como saben, desde hace un tiempo empecé a usar y decorar un diario, un journal, pues. No sigo el método del bujo porque, tras intentarlo por una semana, me di cuenta de que no era lo mío. Así que, como les he contado en otras entradas, mi diario es más una mezcla extraña entre un scrapbook y un diario común y corriente, y me encanta porque sólo lo decoro cuando tengo algo importante qué escribir o cuando realmente me dan ganas. 

El año pasado comencé a usar una libreta tipo Kompagnon de la marca BRUNNEN que compré en un Lumen hace tiempo. No la había abierto y la tenía en el librero junto con las otras libretas de mi colección, pero estoy muy a gusto con ella. Es de cuadrícula numerada y, al inicio, tiene unas páginas para usarlas a modo de índice. Les dejo el dato para aquellos a quienes les guste lo del bujo, porque es una buena opción para llevar un índice ordenado de todo lo que habrá en el journal.






Últimamente mi decoración va mucho hacia los tonos marrones, así que uso trozos de papel kraft o revolución, y tengo pedacitos de papel de hojas que ya no iba a ocupar del todo. También tengo algunas imágenes que he impreso para ponerlas en el journal y lo decoro con todo lo que encuentro y queda, la verdad: tickets de compra, tarjetas o etiquetas bonitas, stickers y washi. Ay, y le pego pedacitos de un libro que rescaté de la basura y que estaba todo destartalado.

Este año, también, quiero ser un poco más organizada con el blog, así que he decidido usar una agenda o planner bloguero, como me gusta llamarlo. No iba a hacerlo, porque el año pasado fallé miserablemente, pero estoy dispuesta a intentarlo una vez más. Es una libretita que compré en un Miniso, con las tapas en un color dorado muy discreto.



Viene por páginas semanales y me resulta bastante cómoda. Por ahora, la he usado para programar algunas entradas y los días en los que subo fotos a bookstagram, así como para tomar nota de algún post que quiera hacer o que esté por publicar. He pensado en decorarla, pero no se me ocurre qué ponerle, así que por lo pronto sólo tiene texto y una que otra imagen que le he pegado en los días vacíos. Espero que me funcione usarla y no dejarla abandonada por siempre.



En fin, quería compartirles estas fotitos y este texto. Sé que hay personas por aquí que hacen journaling o llevan un bullet journal, así que, ¿cómo se organizan ustedes? ¿Y cómo decoran sus libretas? ¡Pásenme fotos! 


lunes, enero 21, 2019

Mis escritos y yo


No recuerdo exactamente cuándo decidí que quería convertirme en escritora. Posiblemente en algún momento entre los 10 y los 14 años, que fue cuando me volví lectora también. Lo que sí sé es que siempre me gustó contar historias. De hecho, aunque tuve mi etapa en la que decía que quería ser médico (antes de descubrir que no tengo el estómago para nada de eso), cantante (antes de darme cuenta de que no me apasiona tanto) e, incluso, maestra (lo que actualmente soy), llegó un momento en mi vida en el que decidí que, sin importar aquello a lo que me dedicara, sería escritora.

Escribir es algo que he hecho desde hace muchos años. Comencé escribiendo cuentos. De hecho, recuerdo que uno de mis primeros cuentos escritos (porque historias ya había contado —y olvidado— muchas), fue uno en el que mis amigas de la primaria y yo éramos súper heroínas y salvábamos al mundo de nuestra archi enemiga, que era la niña que nos caía mal. Creo que mi madre aún conserva ese cuento en algún lugar. En secundaria escribí un cuento que era sobre el Apocalipsis y un ángel, y recuerdo, también, que ese cuento se perdió en un concurso que nunca gané, y porque que no fui lo suficientemente lista como para guardar una copia.

Creo que mi estilo de escritura, todo lo que sé sobre escribir (y que he aprendido, la mayor parte del tiempo, sobre la marcha), se define por dos momentos importantes: el fanfiction y mi elección de carrera.

Una parte importante de mi proceso para aprender a escribir, ha sido escribir fanfiction. Ya en otras ocasiones he mencionado que defiendo mucho el fanfic porque, en todos los años que llevo leyendo y escribiéndolos (a estas alturas, ya más de la mitad de mi vida), he encontrado fics que me han llenado más que un libro publicado, porque son mucho mejores que muchos libros que ya han sido corregidos y editados para entrar al mercado editorial. Así que, sí, soy una escritora que ha encontrado en el fanfiction la comodidad para crear historias quizá más flexibles en el sentido de que su lectura no conlleva el rigor ni la crítica que se le dedica a un libro. Y, también, alguien que gracias a ellos es que he experimentado muchísimo al momento de contar una historia.

Gracias al fanfiction, me he permitido escribir historias cortas (de 100 palabras o menos) y textos que podrían ser libros (el más largo es un fic de casi 100 mil palabras). He escrito historias en primera, segunda y tercera persona, en pasado, presente y futuro. Me he permitido ser descriptiva o centrarme en el estudio introspectivo de mis personajes favoritos. Hasta he escrito a las parejas más crack de mis fandoms, sólo por diversión.

Por otro lado, mi elección de carrera también marcó un antes y un después en mi escritura.

Contrario a lo que muchos pensaron cuando estaba por entrar a la universidad, no fue Letras o Literatura lo que al final estudié. Decidí estudiar Comunicación. No entraré en detalles, pero básicamente mi decisión fue tomada al azar y porque, según yo, en Comunicación tendría más posibilidad de desarrollarme profesionalmente. En realidad, no tenía una aspiración profesional, no había una carrera que me viera estudiando o desarrollando a lo largo de mi vida. Sólo sabía que no ir a la universidad no era una opción y que yo lo que quería hacer, era escribir.

En ese entonces, ninguna universidad cercana a mí, ni pública ni privada, tenía la licenciatura en Escritura Creativa y pues, al final, Comunicación pareció una buena idea. Tenía materias de redacción, de historia y de literatura, junto con otras que no tenía idea de para qué eran, pero no sonaban tan mal. Aunque no me dedico al periodismo ni trabajo en medios ni agencias de comunicación, estudiar esta carrera fue lo mejor que pudo pasarme en la vida.

Estudiar Comunicación me enseñó mucho más de lo que yo esperaba de la carrera y si en algo me ayudó, fue a crearme un estilo propio de escritura. Nunca he sido una persona de muchas figuras retóricas, y si las uso es casi de forma inconsciente, así que nunca he tenido la pretensión de hacerme la culta al escribir con metáforas que no me salen bien. Del periodismo aprendí a ser concisa con lo que quiero decir, a buscar la sencillez y la claridad al escribir. No soy muy descriptiva, tampoco. De hecho, las personas suelen decirme que mi estilo de escritura es muy limpio. Ignoro si mi sencillez es buena o mala, pero hasta ahora es lo que a mí me ha funcionado y, por el momento, es como más me gusta escribir.

Todo este proceso para ser escritora no ha sido fácil. De hecho, la mayor parte del tiempo siento que mi trabajo no es lo suficientemente bueno y, hasta hace un par de años, mi idea era publicar algo hasta que fuera “buena”. ¿Pero qué es ser buen escritor? ¿Escribir de forma correcta? ¿Contar una historia que le encante a todo el mundo? ¿Ser innovador? Al final, vi a tantas personas volviéndose escritores gracias a la auto gestión, y pensé que no tenía por qué esperar a ser “buena”, sino simplemente comenzar. Hacerme buena o no, creo que eso se dará con el tiempo. Tampoco creo ser “mala escritora” y, a juzgar por algunos comentarios de personas cuya opinión crítica me es muy valiosa, he tenido unos aciertos en mi escritura por aquí y por allá.

El año pasado fue mi mejor año como escritora en mucho tiempo, creo que desde los 15 años, que escribía todos los días y escribí ese fic de como 100 mil palabras que mencioné antes y que, afortunadamente, eliminé de todos lados porque era muy malo (y sigue persiguiéndome porque de vez en cuando me escriben preguntando por él).

De hecho, 2018 es el primer año en el que, después de un largo proceso, me he permitido decirme a mí misma “escritora” sin sentir que era una falsa, alguien pretendiendo ser quien no soy. Aunque soy una ferviente defensora del fanfiction, por mucho tiempo me creí eso de que escribir fics no te hace un escritor real, por el hecho de tomar prestados personajes y universos. Sin embargo, en mi caso, cuando me di cuenta de que tenía más fics de universos alternos en los que inventaba todo un mundo, que fics fieles al canon de mis fandoms, ahí fue cuando me di cuenta que de había llegado el momento de perderle el miedo a crear desde cero.

No voy a mentir, hay días en los que no me siento escritora y no siento que mi trabajo genere el suficiente impacto en los muchos o pocos que lo han leído. A pesar de esto, en 2018 mi lema personal fue “paso a paso”; así que ahí ando, dando pasos pequeños en esto de convertirme en una escritora profesional. De momento, tengo ya La verdad tras los secretos, una novela corta de fantasía con elementos LGBT+ (y algunos dirían que hasta homoeróticos), y escribí 4 cuentos entre 2 mil y 10 mil palabras el año pasado, algunos de los cuales quisiera publicar en una antología, en algún momento.

Sé que el camino por el que voy es lento y que no estoy siendo muy inteligente en esto del marketing para mi libro, pero voy haciendo las cosas a mi ritmo y, por ahora, estoy contenta con eso. Pero no se crean, el libro tiene que estar el libro a la venta en Amazon lo antes posible, porque lo he estado postergando desde hace meses.

viernes, enero 18, 2019

Mini reseñas: antologías y libros de relatos



2018 fue un año en el que me sorprendí leyendo más relatos cortos que en otras ocasiones. A decir verdad, nunca he sido una lectora que dedique mucho tiempo a leer historias cortas, relatos y cuentos en particular, pero por alguna razón, durante el año pasado leí algunos libros de cuentos que me gustaría compartir.




MEYER, Marissa. Stars Above.
★★★

Después de leer las Crónicas Lunares, descubrí que existe también esta antología de relatos que cuentan la vida de los personajes principales antes de todo lo que ocurre en la saga. La última historia, además, es una suerte de epílogo de la saga principal. Disfruté leyendo estos cuentos. Como lo decía en mi reseña de Winter, me gusta que el estilo de la autora sea rápido y ameno. Además, me gustó mucho saber un poco más de los personajes que más me gustaron, en especial Scarlet y Wolf.



PAZ, Octavio. Arenas movedizas.
★★★

A ver, a ver, a ver. Este libro lo tenía desde hace tanto, que sólo esperaba el mejor momento para leerlo. Y el momento llegó mientras intentaba cumplir mi reto del año pasado. Arenas movedizas es una recopilación de varios cuentos escritos por Octavio Paz. Algunos son más cortos que otros y unos me gustaron más que otros también, y hay algo en la narración que, a mi parecer, los vuelve un tanto nostálgicos, aunque su tema central no sea precisamente la nostalgia.

Mi favorito fue Mi vida con la Ola y las ilustraciones... vaya, las ilustraciones son muy hermosas. Acompañan perfectamente la lectura. El formato se me hizo algo incómodo porque es un libro de casi 30 cm de alto y pasta gruesa, pero la edición está preciosa.



GAIMAN, Neil. El cementerio sin lápidas y otras historias negras.
★★★★

Hasta ahora, Gaiman nunca me ha decepcionado. En esta colección de cuentos, en especial, hay unos que me encantaron muchísimo. El estilo de Neil Gaiman me gusta muchísimo, creo que es mi autor contemporáneo favorito cuando se trata de fantasía.

El cementerio sin lápidas y otras historias negras hace justicia, precisamente, a la última parte del título: las historias negras. Como en la demás obra de Gaiman (al menos lo que he leído), en estos relatos, el autor mezcla algo lo sobrenatural y los temas oscuros, con elementos urbanos. Así tenemos la historia de un troll que vive debajo de un puente; la de un niño que, harto de ser menospreciado en su casa, decide huir y se hace amigo de un niño fantasma, y, algo agradable, un cuento que después formó parte de El libro del cementerio.



VARIOS. Dreams from the Witch House: Female Voices of Lovecraftian Horror.
★★★★

Éste de acá es mención especial, porque ya había reseñado la antología y todos sus cuentos (pueden leer la reseña aquí), pero lo vuelvo a recomendar, porque creo que más personas deberían leerlo. La antología se compone de 19 cuentos de horror que tienen su inspiración en el trabajo de H. P. Lovecraft. Algunos cuentos son de ciencia ficción, otros de horror; hay uno que es particularmente cómico. Se los recomiendo si es que les gusta la ficción oscura, el horror y todo lo relacionado con la obra de Lovecraft. 


Para este año tengo otros libros de cuentos que quiero leer o estoy leyendo. Con este tipo de libros me pasa que los leo poco a poco, relato a relato, y puedo tardar mucho en terminar el libro completo. Ya les contaré más a su debido tiempo.

lunes, enero 14, 2019

A Little Princess, de Frances Hodgson Burnett


HODGSON BURNETT, Frances. A Little Princess. Puffin Classics. 320 páginas. 
★★★★☆

Hace muchos, muchos años, vi la película de este libro. Recuerdo que me gustaba mucho verla y que lo hice en muchas ocasiones, especialmente cuando la pasaban en la tele. El año pasado estuve leyendo algunos clásicos infantiles y me topé con éste, ¡y qué libro! Como lo mencioné en mi reseña de Goodreads: éste es uno de esos libros en los que sólo quieres que le vaya bien a la protagonista y te alegra su felicidad.

A Little Princess cuenta la historia de Sara  Crewe, una niña que es criada por su padre en la India. Sin embargo, después de unos años, su padre decide que es mejor que se críe en Inglaterra y no en la India, así que la envía a un internado en Londres. Sara llega a su nueva escuela y hogar como una verdadera princesa: vestida con la mejor ropa, mimada con los mejores juguetes, vaya, hasta tiene una persona que la atienda de forma personal, una habitación propia, un pony y un carruaje personal. Son muchas concesiones, pero para la directora del colegio, cada una de ellas vale la pena, pues Sara es su mayor inversión.

A pesar de sus privilegios, y contrario a todo lo que se pudiera creer, Sara no es una niña altanera ni malcriada, sino una chiquilla muy madura y con corazón compasivo. No pasa mucho tiempo para que comiencen a llamarla la "pequeña princesa", no sólo por el dinero de su padre, sino por su actitud misma. Sara es buena con sus compañeras, comparte lo que puede con los demás y tiene la disposición de ayudar cuando es necesario y a quien lo necesite.

Todo marcha perfectamente, hasta que al internado llega la terrible noticia de que su padre, el Capitán Crewe ha muerto; y eso no es todo: antes de morir, quedó en la ruina. De pronto, Sara pasa de ser tratada como una princesa a convertirse en una criada del internado, pues sin familiares y sin forma de pagar por su estancia y educación, no le queda de otra más que trabajar para tener un lugar en donde vivir. Si bien el cambio en su vida no es fácil y aunque es maltratada por años (por la dueña del internado, algunas ex compañeras de clase y, en especial, por los otros criados), Sara siempre procura ver las cosas de la mejora manera, pues sabe que aun cuando la realidad es cruel, siempre se puede huir gracias a la imaginación.

Este libro me gustó mucho. Sara es un personaje que me parece muy lindo y fuerte, y me encanta su personalidad. Me encanta que nunca pierda el estilo, aun en los peores momentos.

No recuerdo mucho de la película (aunque me gustaría volver a verla para comparar la historia con la del libro), de hecho me parece que los finales son distintos, pero al menos en el caso del libro, el final me encantó. Como lo dije anteriormente, éste es uno de esos libros en los que sólo quieres la felicidad de tu personaje principal y Sara lo consigue.

En general, la historia se lee súper rápido y nada, además quería presumirles mi edición de Puffin in Bloom, que es divina. 

sábado, enero 12, 2019

All The Crooked Saints, de Maggie Stiefvater


STIEFVATER, Maggie. All the Crooked Saints. Scholastic Press. 320 páginas.
★★★★

Bicho Raro es un pueblo a mitad del desierto. Podría ser como cualquier otro pueblo desolado, pero en este lugar ocurre algo maravilloso: ahí viven los Soria, una familia de origen mexicano que, por generaciones, se ha encargado de conceder milagros. Nadie sabe si es magia (buena o mala), o si es por verdadera intervención divina que tienen la posibilidad de concederlos, pero lo que sí es un hecho es que a Bicho Raro cada año llegan muchos peregrinos buscando un milagro que les sane su oscuridad interior. 

Los milagros concedidos por los Soria no siempre se manifiestan de la forma como los peregrinos lo esperan y siempre ocurren en dos partes: en la primera, el milagro manifiesta la oscuridad de la persona, quien tiene que vencerla por sí solo. En la segunda, cuando el peregrino logra comprender, aceptar o vencer su oscuridad y, entonces sí, está curado de cualquier mal que le aqueja. Por años, los Soria se han conducido con reglas estrictas respecto a los peregrinos que los visitan y los milagros que ocurren en Bicho Raro. En especial, hay una regla que ninguno de los Soria se atreve a romper, y es que ellos no tienen permitido interferir en los milagros de los peregrinos una vez que se conceden porque se arriesgan a ser consumidos por su propia oscuridad. 

Beatriz, Daniel y Joaquín son primos. De los tres, Daniel es considerado el Santo de Bicho Raro, y es quien concede los milagros a los peregrinos. Beatriz es llamada la Chica Sin Sentimientos, porque, aparentemente, no puede sentir y Joaquín... él sólo quiere ser un DJ famoso, bajo el nombre de Diablo Diablo. Ellos tres son el motor de la historia. Los Soria no pueden interferir en los milagros de los peregrinos y Daniel hace precisamente eso: interviene en un milagro; y cuando todo parece perdido para él, Beatriz y Joaquín deciden que no van a permitir que la oscuridad lo consuma.

No es un secreto que Maggie Stiefvater es mi autora de YA favorita. Desde que leí The Raven Cycle me gustó mucho su estilo y sus historias, y cuando vi que estaba por publicar All the Crooked Saints, decidí que debía leerlo. Fue un libro que disfruté bastante. Tiene un toque de realismo mágico que me deja un buen sabor de boca: entre un hombre que se convierte en gigante, una chica sobre la cual no para de llover y hasta un Padre con cabeza de coyote, los milagros de Bicho Raro demuestran que nunca son lo que tú esperas.

All the Crooked Saints es una historia sobre la familia y eso me agrada. El amor que existe entre Daniel, Beatriz y Joaquín es innegable, y es hasta cierto punto conmovedor todo lo que hacen por salvarse entre ellos.

Como el libro cuenta la historia de una familia de ascendencia mexicana (los Soria de la novela ya son mexicanos-americanos, pero sus antepasados eran mexicanos que huyeron a Estados Unidos durante la Revolución), hay muchos detalles que referencian a la cultura mexicana. Los nombres, de entrada, las comidas, algunos datos sobre costumbres de los Soria y uno que otro fragmento en español. Leí por ahí que hubo un poco de polémica porque acusaban a la autora de apropiación cultural, pero a mí no me parece que lo sea, ni me parece molesto que Stiefvater haya escrito una historia sobre una familia mexicana cuando ella claramente no lo es.

La verdad es que sí les recomiendo este libro si quieren leer algo rápido y bien contado.

domingo, enero 06, 2019

Reto Leyendo a los Clásicos 2019



¿Qué? Pensaron que no habría reto este año? ¡Pues sí lo habrá! Sólo que esta primera semana del año se me pasó volando y apenas ahora hago esta entrada, pero aquí la tienen.

¿De qué va este reto?

Este es un reto que surgió cuando Allison de Bosque de Invierno y yo nos dimos cuenta de que no habíamos leído muchos clásicos: esos libros que han trascendido, por su importancia, en el tiempo, y siguen leyéndose años y años después de haber sido escritos.

Con la intención de leer más de ellos, decidimos crear este reto para el 2014.  Gracias a este reto, he leído muchos libros geniales que entran en la categoría de clásicos; son libros que muchos temen, pero que la mayor parte del tiempo, me han dejado experiencias maravillosas.

Especificaciones

  • El reto se llevará a cabo entre el 1 de enero y el 31 de diciembre del 2019.
  • Consiste en leer al menos cinco (5) libros clásicos. Si no sabes cuál podrías leer, puedes revisar esta lista. A esto le llamaremos categoría general.
  • Puedes fijar la cuota de libros con los que participas en este reto. Lee 6, 10, 20, 50 o los que te apetezcan.
  • Puedes inscribirte a lo largo de todo el año, no necesariamente en enero.


¿Qué debo hacer para participar?

Súper sencillo, sólo es necesario que respondas a esta entrada diciéndome que quieres participar junto con tu nick y, de manera opcional, una liga a:

  • tu blog
  • tu facebook
  • tu twitter
  • cualquier otro sitio o red en la que las personas curiosas te puedan encontrar, como goodreads o instagram

¿Quieres subirle la dificultad al reto?

Este año se me ocurrió hacer un pequeño cambio en el reto, y es que además de participar en la categoría general, que es en la que eliges los libros que lees, independientemente de su género o autor, en esta ocasión les propongo cinco categorías mínimas para completar el reto.

Categorías especiales

  • Un clásico infantil
  • Un clásico gótico o de horror
  • Un clásico de fantasía
  • Un clásico de suspenso
  • Un clásico de ciencia ficción

A lo largo de todo el año, usaremos el hashtag #leyendoclásicos en redes sociales, para compartir los enlaces a sus reseñas o video reseñas, comentarios, sugerencias, encuestas y más. También tenemos un grupo en goodreads, pero casi no lo usamos porque somos medio fail y creo que todos olvidaron que existía, oh the irony. Desde el año pasado quería implementar algunos retos dirigidos hacia bookstagram como parte del reto y lecturas conjuntas, y lo más seguro es que este año lo haga.

¿Se animan?

Participantes

CinJM
instagramtwittergoodreads

Lau
blog

Julieta
blog

Nanny
blog

Annie
bloginstagramgoodreads

 Nina
blogtwitterfacebook

Valya
blogtwitterinstagramgoodreads

Nataly
blog 

Salinger
blog

Violeta
blog

Azul
blogtwittergoodreads

Alejandra Hernández
bloginstagramtwittergoodreads

jueves, enero 03, 2019

Anne of Green Gables, de L. M. Montgomery



MONTGOMERY, L. M. Anne of Green Gables. Puffin Classics. 426 páginas.
★★★★☆

Marilla y Matthew Cuthbert son dos hermanos de mediana edad que viven juntos en Green Gables, una granja en un pueblecito llamado Avonlea. Con la intención de tener ayuda para las labores de la granja, deciden adoptar a un muchacho. O, al menos, un muchacho es lo que esperaban pero, en su lugar, reciben a una simpática niña llamada Anne Shirley. Aunque Matthew se encariña rápidamente con la pequeña, Marilla no está nada contenta con la situación, así que planea regresarla al orfanato. Anne, sin embargo, es tan ocurrente e ingeniosa, que no pasa mucho tiempo para que los Cuthbert cambien de opinión y decidan criarla como parte de la familia.

Anne of Green Gables es la historia de cómo esta niña encuentra un hogar, una familia y amigos, pero también sobre encontrar belleza en todas partes. Comencé a leer la novela después de ver la primera temporada de Anne with an E, de Netflix, y porque me gustó mucho el personaje de Anne. Es una chica muy curiosa e imaginativa, y la mayor parte del tiempo su imaginación suele ponerla en aprietos, pues tiende a distraerse todo el tiempo y pensar en todo menos en lo que tendría que hacer en el momento.

Además de Anne, hay muchos otros personajes que son dignos de mencionar. Matthew es callado y tímido, es un total introvertido que no sabe cómo relacionarse con otras personas, y encuentra en Anne alguien con quien puede pasar el tiempo sin sentirse abrumado. De hecho, en más de una ocasión menciona que Anne habla lo suficiente por los dos y que él es más que feliz escuchándola hablar. Por otro lado, su hermana Marilla es una mujer rígida y acostumbrada a no expresar sus emociones, y aunque es difícil, Anne logra romper todas sus barreras. Anne es para Marilla todo lo que ella nunca se permitió ser: creativa, ingeniosa, enamoradiza, y como es quien se auto impone la labor de educarla, es quien riñe a la pequeña.

Estos tres personajes no podrían ser más diferentes y su dinámica evoluciona de una manera que me encanta. Matthew y Marilla pasan de ser dos solterones solitarios a los jefes de una familia un poco extraña pero no por ello menos hermosa.

También es digna de mencionar la rivalidad que se gesta entre Anne y Gilbert Blythe, un chico que se burla de ella a manera de broma y esto ocasiona el rencor eterno de Anne, quien no es capaz de perdonarlo. Al final, entre ambos surge una rivalidad por ver quién será el mejor estudiante del colegio, lo cual los nutre de manera positiva, pues los dos se esfuerzan por aprender lo más que pueden. Y ay, yo los shippeo mucho. También shippeo mucho a Anne con Diana, pero eso es harina de otro costal. 

En general, disfruté muchísimo leyendo esta historia. Me parece una historia súper tierna, definitivamente me enamoré del personaje y su amor por el mundo. Si pueden leerla, háganlo, para ver si coincidimos en opiniones.

© Palabras y letras. Design by Eve.