¿Qué es esto? ¿Un café virtual? Pues sí, después de pasar por esto me quedaron ganas de hablar sobre lo que dice el título de esta entrada, ¿y qué mejor manera de hacerlo que en esta sección? (Que, para quienes no lo sepan, es en donde discutimos algunos temas relacionados son los libros). Con esta entrada no pretendo compartir sugerencias sobre cómo salir del bloqueo, porque prefiero dejarlo para otra ocasión, pero sí quiero hablar de una reflexión a la que llegué después de estas semanas con bloqueo lector.
Espero que tengan su café a la mano y un lugar cómodo para poder comenzar con esta charla virtual.
El bloqueo lector. Ah, esa cosa tan terrible que nos ha pasado a todos los lectores alguna vez en la vida. Un bloqueo lector, también conocido como una pesadilla reading slump, es cuando no importa qué hagas, ni cuándo lo hagas ni cómo lo hagas, simplemente eres incapaz de leer. Lo cual no es nada agradable, en especial cuando llevas un ritmo de lectura constante y de pronto llega un momento el que no puedes leer más.
Las razones de estos bloqueos son variadas. Tal vez sigues demasiado inmerso en el mundo del último libro que leíste, o fue tan genial que simplemente no concibes la idea de tomar otro libro. Tal vez hay situaciones ajenas que te mantienen con la mente en otro lugar (exámenes, estrés en el trabajo, problemas familiares, entre otros). O quizá estás lleno de apatía por todo y todos, y sólo quieres quedarte echado en la cama sin moverte hasta que pase la vida.
Mis bloqueos no suelen ser muy largos; nunca logran superar un mes, lo cual es genial porque me desespera eso de no poder leer. Después de analizar un poco, llegué a la conclusión de que mi reciente bloqueo se debió a las siguientes dos razones:
La primera: uno de los libros que leía en ese momento, y que fue reseñado ya en el blog. Ya en algún momento he dado mi opinión respecto a siempre terminar un libro en vez de abandonarlo cuando no te agrada, pero lo repito para los que no lo sepan. Soy de las que la mayor parte del tiempo terminan lo que leen, aunque no les guste. Es un hábito que quiero dejar.
Intento aprender a dejar de lado las cosas que no me gustan, pero hablando de libros en concreto, aún me cuesta trabajo. Y eso fue, desde mi perspectiva, uno de los detonantes de este bloqueo. ¿Por qué? Pues muy simple: objetivamente sabía que lo mejor era dejar ese libro que no me gustaba y empezar algún otro. Subjetivamente no quería dejarlo a medias porque me entraba la culpa de no acabarlo. Sí, es un tanto jodido, pero así fue.
La segunda: estoy intentando leer todos los libros que tengo en lista de espera desde hace años y creo que se volvió casi una obligación. No tiene sentido, lo sé, porque no es que deba leerlos. No obstante, mi lista de libros sin leer se ha acrecentado mucho en los últimos meses porque he estado adoptando libros de los cuales familiares y amigos quieren deshacerse.
Tengo 69 libros que aún no leo. Vale, no son tantos y podría ser peor, pero creo que fue un tanto abrumador recibir muchos libros de pronto. Literal, un día recibí 12 y a la semana me llegaron 16, que se sumaron a mi anterior lista de libros por leer. Muchos son títulos que me llaman la atención pero en general no son libros que muera por leer.
Mi mayor desesperación por no poder leer no fue tanto el hecho de no poder leer, sino pensar que entre más tiempo pase desde mi última lectura, y por consiguiente, desde mi última reseña, el blog irá quedándose parado. Intento que eso tampoco me importe, porque no quiero que bloguear se convierta en una obligación, pero esta es una discusión que dejaremos para otra ocasión.
Y pues eso fue lo que ocurrió. Logré salir del bloqueo y el mundo no terminó porque no leí libros en dos semanas, así que tampoco me preocupo tanto.
¿Por qué razones llegan a tener un bloqueo lector? ¿Cómo le hacen para salir de un bloqueo? ¿Qué tan largos suelen ser sus bloqueos?
Dejen sus comentarios y respondan cuantos comentarios quieran: el café virtual es para que podamos compartir experiencias entre todos y respondernos unos a otros.
Les dejo su café:
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